Fotografía de Luis Fernando nadando en la Poza Azul de Tamasopo. Trae un chaleco salvavidas. Al fondo se ven más personas nadando, vegetación y una pared de roca.

Las comillas entre las que se escribe el “turismo Inclusivo”: Reflexiones en la Huasteca Potosina.

Las comillas entre las que se escribe el “turismo Inclusivo”: Reflexiones en la Huasteca Potosina. 510 680 Instituto Mexicano de Turismo y Accesibilidad

Por Luis Fernando Cabrera Peñaloza.

Sé que nadie lo pide, y que en ocasiones nadie tampoco lo lee, pero aquí va un blog sobre reflexiones que he hecho estos días sobre turismo para personas con discapacidad (PCD).

Lo primero que con decepción debo decir es que la lucha por un turismo accesible, seguro será batalla para otra generación de PCD. Con esto comprenderán estimados lectores la frustración que generan las clásicas frases de: “las PCD ni vienen ¿para qué lo hago accesible?” “Eso es muy caro, ¿Apoco si viajan?”

Esta vez yo también me cuestioné si valía la pena gastar mis moneditas conseguidas con tanto esfuerzo, para frustrarme con este jodido capacitismo. Pero bueno, que me voy a la huasteca Potosina. Lo primero a realizar era visitar el jardín surrealista de Edward james, y lo que nos recibió fue el aviso explícito en su página web, de que no recomiendan el ingreso a PCD; o sea “¡Este lugar no es pa que acudan!” “¡Aquí no a las PCD, quédense en su casa, pa que salen!” “¡Nada más se ponen en peligro!” pero el Luis optimista y motivado dice: No importa chingao, yo remuevo esas jodidas barreras. Así que vámonos a las entrañas de la huasteca.

Captura de pantalla de la página del jardín Edward James, donde se Indica que no se recomienda la visita a personas con movilidad reducida.

“¿Cómo los traen aquí?”

Poza azul en Tamasopo, más 25 metros de profundidad, un lugar en el que el turista con discapacidad está muy lejos de ser considerado como visitante. Cero accesibilidad, cero empatía, cero atención al cliente. Es más, casi sentía mi autonomía reducida a nada. Las personas murmuraban al rededor — “¿Cómo los traen aquí?” y los guías…. jamás se dirigieron a nosotros como turistas, pos pa qué si tienen discapacidad. Siempre la conversación con nuestros acompañantes, como si fuéramos lastres, cosas sin voluntad. —”yo digo que no los bajes, que entren al agua aquí arriba”.

¡Perdón! Pero no le digan eso a alguien que se educó con la cultura del demostrar. Así que aquí vamos, porque las barreras son de la mente… nótese el sarcasmo.

Bajamos los más de 300 intentos de escalones, y estuvimos nadando abajo, porque siempre, yo decido. Pero a su vez, no dejaba de pensar en las personas a las que si de plano esas barreras les obstaculizan totalmente cualquier tipo de disfrute o participación en actividades turísticas.

Tenemos Derecho a más.

Me queda totalmente claro que no somos nosotros, no es exactamente la limitante de no ver, o no escuchar, son las barreras, sobre todo actitudinales, las que nos reducen. Y estimados lectores, no es que me queje de todo, solo que tenemos derecho a un poquito de accesibilidad, a un poquito de placer, de gozar un tiempo libre, a la recreación sana.

Y no me malinterpreten, claro que hubo cosas buenas y gente con actitudes inclusivas por lo que no me arrepiento del viaje, dado que lo anteriormente expuesto, son mis ojos y mi perspectiva de PCD. Pero en mi fuero interno sé que si no lo hacemos de esta manera, alzando la voz, documentando experiencias, no existirá ninguna manera para llevar la inclusión al sector turístico.

Disfruté la paz de las cascadas, las entrañas de la montaña, la comida, y finalmente la vida. Pero no puedo dejar de gritar, las PCD tenemos Derecho a más.

Ilustración de Luis Fernando Cabrera, una persona con discapacidad visual con cabello corto. Viste de camisa con tres franjas verticales al centro y un saco.

Luis Fernando Cabrera Peñaloza

Es licenciado en derecho, Defensor de derechos humanos de personas con discapacidad; colabora con diversas asociaciones en derechos humanos, escribe y es conferencista sobre discapacidad, inclusión, derechos humanos, accesibilidad, medios alternativos de solución de controversias y justicia restaurativa.

Puedes seguirlo en Twitter como: @LuisFer39762360

O contactarlo por correo electrónico: [email protected]